La figura del director deportivo es de vital importancia hoy en día, y si no al menos alguien que haga esas funciones dentro de un Club pero teniendo las ideas muy claras.
Por ejemplo, no podemos ir de talonario fichando jugadores y después querer que los jugadores del filial nos salven la temporada, o si apostamos por una cantera no podemos estar cambiando de entrenador cada 3 meses si los resultados no acompañan.
Dicho esto, la figura del director deportivo en un Club tiene que definir el camino. Si hay interferencias en el trabajo por parte de la directiva o presidente todo poderoso de un Club a medio plazo las cosas no van a funcionar.
Desde la planificación de una base hasta quien tiene que ser el entrenador del primer equipo, decisiones de vital importancia que además van generalmente unidas. De la decisión de traer a un entrenador que le pedimos exclusivamente resultados no podemos esperar que apueste por gente joven, o insisto, la situación contraria, no puedo exigirle a un entrenador que viene a formar un equipo joven para competir en un plazo de 3-5 años al máximo nivel resultados la primera jornada.
El director deportivo además de seleccionar al entrenador idóneo del proyecto debe buscar esos jugadores que se adaptan al sistema de juego que se quiere imponer en la entidad así como darle al entrenador de las herramientas necesarias para que lo haga. Vamos al fútbol sala, si fichamos un entrenador cuya mayor característica es el juego con pivot estático ¿Sí no le damos un pivot de esas condiciones flaco favor estamos haciendo al Club?
Rastrear el mercado es complicado. No solo hay que tener en cuenta las características de los jugadores, si no también tenemos que evaluar su personalidad, como va a encajar en un vestuario por ejemplo que ya está hecho. La convivencia, el día a día es un factor importante para conseguir éxitos. Muchas veces vemos jugadores con un tremendo potencial, pero pensándolo bien, mejor que se queden en sus actuales clubes porque son verdaderas bombas dentro de un vestuario.
Os cuanto un caso reciente que me ha pasado. Resulta que un entrenador de un equipo de mi provincia llama al entrenador de otro equipo(se saltan la figura del director deportivo, haciendo amigos…) Este le informa que tiene que hablar con el director deportivo. Tras una breve conversación este entrenador lo único que quiere es que le mande al jugador “para probarlo” ¡¡¡Jugador que ni han visto!!! Tremendo… ¿Oiga usted? ¿Acaso se piensan que vamos cediendo los jugadores así como así? Es como si yo ahora llamara a ese Club y le dijera, “Oiga, mándeme a sus dos mejores jugadores que queremos probarlos a ver que tal”. No veas la broma, pero claro, sin planificación pues así se va por la vida.
Planificar es vital para el buen funcionamiento de un Club. Hace unos años los “dólares” pues escondían todas las carencias. Si la cosa iba mal, pues se tiraba de chequera y se apagaban fuegos. La situación actual hace que “equivocarse” pues sea un verdadero problema porque los “dólares” pues cuestan más sacarlos. Por eso la importancia de un director deportivo. No es necesario que sea un “profesional”, tan solo es necesario tener las ideas claras y apostar por esas ideas años, no de domingo a domingo, porque entonces seguro que las cosas no van a funcionar.
Terminando, si existe la figura del director deportivo es para usarla. Y un Club gira sobre esa figura. Con pocos recursos se ven las carencias de los Clubes, pero también sus aciertos. ¡Ponga un director deportivo en su vida! Pero déjelo trabajar… ¡No se arrepentirá!